Los esfuerzos por promover el desarrollo de los alumnos y manejar con eficiencia los centros educativos, han motivado a rediseñar e innovar la gestión educativa. Asimismo, los avances tecnológicos han logrado permearse en esta actividad, pues con las diversas alternativas que pone a nuestra disposición, se ha dado un salto hacia la mejora en la gestión de las escuelas.

Gracias a estos motores, el enfoque con respecto a las necesidades que se tienen, tanto por parte del personal como de las herramientas, ha cambiado. Te platicamos de ellas.

 

Personas

 

Hablando de las personas, se buscan diferentes cualidades y fortalezas.

Anteriormente, el reclutamiento se limitaba a las habilidades duras, o aquellas que corresponden a fines aplicativos en el puesto de trabajo, tales como administrativas, organizacionales, gestoras, entre otras.

Sin embargo, ahora también se buscan personas que cuenten con habilidades suaves, o aquellas enfocadas a la personalidad, inteligencia emocional, relación social, etc. Básicamente, habilidades humanas.

Esta evolución se debe a que la innovación se basa fundamentalmente en ambas habilidades, duras y suaves, por lo que se necesitan para innovar la gestión del centro educativo.

 

Herramientas

 

Las herramientas modernas requieren que la interacción sea rápida, eficiente, y adaptable. De igual manera, exigen que los resultados contengan las mismas características, especialmente porque a diario se crean nuevas herramientas que ofrecen diferentes beneficios.

A la par que la tecnología nos brinda nuevas adecuaciones para innovar la gestión del centro educativo, esta crea necesidades que se perciben por parte del personal administrativo, los docentes, y los alumnos. A su vez, esto impulsa la creación de herramientas que satisfacen dichas necesidades, y así sucesivamente.

Este círculo virtuoso impulsa la gestión de los centros educativos en diversos aspectos, como en el financiero, académico, operativo, de proyectos, etc.

A medida que las personas y la tecnología revolucionen la manera en que vivimos, nuevas necesidades existirán para las escuelas, por lo que se desarrollarán nuevas tendencias con el propósito de satisfacerlas.